23-03-2010
Dos investigadores del Centro de Investigaciones Médicas de la Universidad de Málaga presentan una Tesis Doctoral sobre el Síndrome de Tourette
El Dr. Berthier con una dilatada experiencia clínica y amplios y demostrados conocimientos sobre el síndrome de Tourette dirigió a Dra. Dávila quien defendió el pasado 26 de febrero la Tesis Doctoral titulada “Avances en los mecanismos fisiopatológicos del síndrome de Tourette”. Estos investigadores han estudiado aspectos que aún no habían sido explorados exhaustivamente y que son de crucial importancia por su relevancia clínica o porque pueden mejorar el conocimiento de los mecanismos que subyacen al síndrome de Tourette. Concretamente, se han analizado las anomalías encontradas a nivel del tronco cerebral en pacientes con síndrome de Tourette, los trastornos adquiridos por disfunción de los ganglios basales que remedan al síndrome de Tourette (Tourettismo) y aspectos concretos de comorbilidad en relación al síndrome de Asperger y suicidio.
Los resultados de sus estudios muestran que:
Las lesiones observadas con resonancia magnética nuclear de un subgrupo de pacientes con síndrome de Tourette en la sustancia nigra, donde se originan las neuronas que liberan dopamina, está asociada a síntomas diferentes que incluyen una mayor ejecución de movimientos estereotipados con las manos y los pies, que puede distinguirse de los tics por su carácter repetitivo.
Las lesiones pequeñas de los ganglios basales (circuitos prefronto-subcorticales) pueden ocasionar la aparición tardía de Tourettismo y reactivación de síntomas obsesivo-compulsivos.
Las personas en las que coexisten los síndromes de Tourette y Asperger y que son socialmente «pasivas» muestran incapacidad para detectar situaciones sociales amenazantes y para reaccionar adecuadamente lo que les hace vulnerables a posibles peligros. Estos déficits están relacionados con la dificultad que presentan para interpretar adecuadamente las expresiones faciales y entonación afectiva y con una percepción disminuida del dolor.
Los adolescentes y adultos jóvenes con síndrome de Tourette, comorbilidad psiquiátrica grave (especialmente depresión y conductas impulsivas-agresivas), pobre ajuste psicosocial y escasa respuesta al tratamiento deben ser supervisados regularmente por el personal socio-sanitario para detectar la existencia de ideación suicida y eventos vitales negativos que podrían eventualmente conducir al suicidio.
Fuente: Dra. Guadalupe Dávila